Señor Director:

En 1976, una noche de Diciembre, se produjo el desalojo de cientos de familias que vivían en la Villa San Lus de Las Condes. El conjunto habitacional, construido en los años 70 como respuesta a políticas públicas de integración social, fue truncada bruscamente y sus habitantes dispersados hacia la periferia de la ciudad.

A medio siglo de estos sucesos, un acuerdo entre los actuales propietarios del terreno en el que se encuentra el último vestigio de los edificios de cuatro pisos y dieciséis departamentos, declarado Monumento Histórico en 2017, y el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, la Fundación Desalojados de Villa San Luis, permitió llamar a un Concurso de Anteproyectos de Arquitectura que contó con propuestas de 61 equipos de Arquitecto.

El Concurso fue patrocinado por el Colegio de Arquitectos y la Asociación de Oficinas de Arquitectos y culminó con la elección del proyecto de los arquitectos Umwelt y Plan Común luego de tres días de deliberación del Jurado.

Hoy celebramos que luego de siete años de negociaciones, este proyecto vea la luz para hacer visible la memoria histórica de los sucedido allí y entregar paz a los espíritus de los que tanto sufrieron.