De símbolos y memoriales
Por Pablo Jordán F.
Presidente Asociación de Oficinas de Arquitectos
La Tercera
Señor Director:
El anuncio de un plan de recuperación de los espacios públicos en el eje Alameda, incluyendo la Plaza Baquedano o Italia, reconforta y alienta a sumarse a esta iniciativa urbanística.
La incorporación de carga simbólica a los espacios de libre tránsito es una forma normalizada en la historia de la ciudad, la que mediante monumentos da memoria a héroes, reconoce aportes cívicos, representa principios filosóficos, refuerza la identidad, recuerda gestas, da cuenta de valores humanos, o premia. Los monumentos urbanos son así expresión de acuerdos sociales generales y permanentes. Cosa distinta son las frecuentes intervenciones espontáneas y pasajeras de la sociedad en sus espacios públicos,dando cuenta de un particular dolor, accidente, preexistencia o sentimiento popular.
En tiempos de recomposición del tejido social, en que como sociedad quisiéramos mejorar nuestras bases de convivencia, no es oportuno concentrar la atención social y mediática en la utilización de elementos de infraestructura de transporte urbano, como la entrada al Metro Baquedano, como piezas simbólicas de procesos aún abiertos.
Apoyamos por ello la estrategia mostrada por la alcaldesa Matthei, quien, a partir de la responsabilidad de mantención y operación de la comuna, ha puesto su energía en la recuperación operativa y aseo de estos espacios, reservando para una reflexión posterior, fundada y participativa, la integración de carga simbólica en ellos.
Con 25 años de historia, nos hemos ganado un espacio importante para la representación de los arquitectos en el debate público y frente a la autoridad. Buscamos tener una voz nítida y respaldada técnicamente, queremos llegar con nuestro mensaje a la opinión pública, y ser capaces de construir una red amplia de vínculos con la sociedad.