Dispar ubicación en calidad de vida
Por El Mercurio de Valparaíso
Una enorme diferencia de calidad de vida entre la comuna de Concón y la de Valparaíso reveló un estudio realizado por la Cámara Chilena de la Construcción y el Núcleo de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica de Chile. El Indicador de Calidad de Vida Urbana (ICVU) 2013, ubica a Concón en el sexto lugar a nivel nacional y en el primero a nivel regional. En tanto Valparaíso ocupó el último lugar en la región y el puesto 81 entre las 93 comunas de diez regiones donde se focalizó el estudio.
Las grandes diferencias y la ubicación de Valparaíso como una de las últimas del país llama a preocupación y, aunque es conocida la deficitaria calidad de vida de nuestra capital regional, existe ahora una constatación científica de sus muchas debilidades. Esta preocupación exige, consecuentemente, acciones concretas por parte de la Municipalidad, el Gobierno Regional, los servicios públicos y el área privada, para tratar de ir escalando posiciones en los diversos rubros que fueron analizados.
La región, en todo caso, sale bien parada con la ubicación de Concón, que aparte de su sexto lugar en el universo estudiado, es la primera entre las de regiones. Le superan sólo las comunas de Vitacura, Las Condes, Providencia, Lo Barnechea y La Reina, todas de la Región Metropolitana.
El estudio, que midió las 93 comunas consultadas, abarcó el 83 por ciento de la población del país, evaluándola en seis áreas: condiciones laborales, ambiente de negocios, condiciones socioculturales, conectividad y movilidad, salud y mdioambiente y vivienda y entorno.
Valparaíso exhibe un índice promedio de 38 puntos, siendo el más bajo el de ambiente de negocios, con 27.94 puntos. Concón alcanzó un índice promedio cercano al 57 por ciento; mientras que la comuna de Viña del Mar no resultó muy bien evaluada, ya que ocupó el lugar 27 del ranking, con 47.87 puntos. Villa Alemana quedó en el lugar 30 y Quilpué, en el 33.
El hecho de que Valparaíso esté ocho puntos más bajo que la media nacional debe transformarse en el incentivo para que la capital regional pueda salir de esa incómoda posición, y, en ello deben involucrarse, como lo hemos sostenido, no sólo sus autoridades, sino también el sector privado, las universidades y en fin, la comunidad toda, para repuntar en su calidad de vida.
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